Título original: Ragnarok
Año: 2020
Duración: 45 min.
País: Dinamarca
Dirección: Adam Price (Creador), Mogens Hagedorn, Jannik Johansen
Guion: Emilie Lebech Kaae, Adam Price, Simen Alsvik, Christian Gamst Miller-Harris
Música: Halfdan E
Fotografía: Philippe Kress
Reparto: David Stakston, Jonas Strand Gravli, Emma Bones, Herman Tømmeraas, Theresa Frostad Eggesbø, Henriette Steenstrup, Fridtjov Såheim, Gísli Örn Garðarsson, Bjørn Sundquist, Synnøve Macody Lund, Tani Dibasey, Odd Magnus Williamson, Kornelia Eline Skogseth
Productora: SAM Productions. Distribuidora: Netflix
La llegada de una madre y sus dos hijos a la localidad de Edda desatará una cadena de inesperados y sobrenaturales acontecimientos que pondrá en peligro al lugar y a todos sus habitantes Bajo la nieve que les rodea y tras la mirada de los lugareños se ocultan ancestrales secretos, mitológicas criaturas y eternas luchas de poder, es la hora de que todo salga a la luz...
A favor de "Ragnarok" apuntaremos la magnificencia de los espacios naturales donde desarrolla su acción, un deleite para la mirada, un paisaje al que saca el máximo partido y es ideal marco para que la existencia de seres más allá del tiempo y el poder resulte plausible. Igualmente agradable resulta su trabajo de guión, un relato que, pese a poblarse de incongruencias, situaciones inverosímiles y cuestionables giros, consigue divertir una vez logramos desactivar los prejuicios y abandonarnos al puro entretenimiento lúdico.
Lo que resulta algo curioso es cómo "Ragnarok" logra hacer mucho más atractivos e interesantes los personajes ligados al "lado oscuro", que a los protagonistas que pugnan por la victoria del bien. Los roles, y, sobre todo, la calidad interpretativa de los villanos supera con mucho a la de sus contrincantes y eso hace que la implicación del espectador con lo narrado se vea inmediatamente afectada.
Con sus luces y sus sombras, con sus grandes aciertos y tremendos errores, no podemos dejar de admitir que "Ragnarok" entretiene y resulta un vehículo evasivo para pasar el rato alejándose de la cotidiana realidad.
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