viernes, 30 de septiembre de 2011

YellowBrickRoad

Valoración: 4/10


Jesse Holland y Andy Mitton dirigen y firman el guión  de este film de terror atípico, extraño…

“YellowBrickRoad”, nos ubica en Friar New Hampshire, una población donde, en 1940,  todos sus habitantes se reunieron para partir caminando por un sendero que se internaba en lo más profundo de los bosques adyacentes al pueblo. No se llevaron nada, ni dinero, ni pertenecia alguna, incluso sus mascotas quedaron abandonadas… y jamás regresaron. Grupos de búsqueda hallaron cientos de cadáveres, unos habían perecido de frío, otros habían sido claramente torturados y asesinados… y otros tantos permanecen desaparecidos. A raíz de este funesto acontecimiento, las leyendas en torno a esta población y sus bosques no tardan en crecer sin mesura… y en 2008 un equipo de investigación decide tomar el “camino de baldosas amarillas” del título, adentrarse en los bosques  y tratar de descubrir qué ocurrió realmente…

La premisa argumental de la película es altamente interesante, y atrapa al espectador durante la primera media hora de metraje, llenándolo de interrogantes, planteándole nuevas y sobrenaturales incógnitas una vez que comienza el viaje y descubrimientos de los protagonistas…  Pero a partir del primer hecho violento comienza a desinflarse y el interés cede al sopor y al soberano aburrimiento. El guión, lleno de trampas y vacíos, gira y gira sobre sí mismo, saltando, de una amena película de terror, a una propuesta metafísica (cuyos recursos muchos han comparado con los utilizados en la serie "Lost") que pierde absolutamente al espectador en sus inexpugnables recovecos.

Un film fallido, con una gran propuesta de partida que bien podía haber aprovechado para regalar, pese a sus escasos medios, una buena película de terror psicológico/sobrenatural y que, en lugar de ello, prefiere navegar por una pretenciosa producción pseudofilosófica, una lástima, un aburrimiento. A evitar.

- Enoch -

Vampires

Valoración: 5/10


El director Vincent Lannoo (“Ordinary Man”, “Strass”) dirige y co-escribe (con Frédérique Broos) el guión de esta atípica enésima visita al mundo de los vampiros.

En esta ocasión el formato de la cinta es de falso documental. En ella conoceremos gracias a un equipo televisivo a una familia de vampiros belgas (interpretados por Paul Ahmarani, Julián Doré, Carlo Ferrante, Alexandra Kamp-Groeneveld…), un matrimonio con dos hijos, y su estilo de vida, amigos, actividades, régimen alimentario (sangre de inmigrantes ilegales que guardan en su corral del jardín)…  así como los problemas que la adolescencia vampírica de los jóvenes provoca y el exilio que puede suponer el quebrar las estrictas reglas de su mundo.

En una época histórica en que el mundo de los vampiros en el cine está en un punto álgido y estos se edulcoran, se cargan de glamour y mágicos poderes, aquellos que nos dibuja Vincent Lannoo son mucho más mundanos, decadentes y autoparódicos, un contrapunto altamente interesante a las familias “crepusculares” chupasanges a los que estamos acostumbrados.

El falso documental pretende, a través de sus sobrenaturales protagonistas, realizar una ácida crítica social y pone en evidencia, con las aventuras de los no-muertos lo más bajo de los vivos, el ser humano, lo que le da una trascendencia más allá de la pura carcajada y entretenimiento.  

No obstante el conjunto no llega a convencer del todo, se queda a medio camino de la crítica, a medio camino de la parodia, a medio camino del drama, de la comedia… resulta, una vez visionada, interesante pero mucho menos arriesgada de lo que cabía esperar, y eso le pasa factura frente al tipo de espectador que enfrenta una película de estas características. 

- Enoch - 

jueves, 29 de septiembre de 2011

Sirena (Siren)

Valoración: 6/10



Desde Gran Bretaña y firmada por el director Andrew Hull (quien a su vez realiza en colaboración con Geoffrey Gunn el guión de la película) llega esta producción de cine de terror, ficción mitológica que busca en el terror psicológico la inquietud del espectador.

El film, protagonizado por Eoin Macken, Anna Skellern, Tereza Srbova, y Anthony Jabre, nos cuenta la historia de tres amigos (Ken, su novia Rachel y su amigo Marco, un experto navegante) que se encuentran realizando una idílica travesía en barco hasta que una señal de socorro originada en una isla supuestamente desierta rompe la paz, y no dudan en desviar su rumbo para atender la misteriosa llamada. Entra en juego entonces una extraña figura en juego, una seductora y hermosa mujer que no sabe quién es, ni cómo ha llegado hasta ese inhóspito lugar… el misterio está servido.

“Siren” se nutre de unos muy vistosos exteriores, unas interpretaciones aceptables, una fotografía cuidada y un guión a ratos intenso, a ratos tramposo. Todos estos elementos hilan una película de atmósfera, cuyo factor “terror” campa en el terreno de lo psicológico más que en lo visual, ataca a los miedos más primarios y mantiene conjeturando al espectador a lo largo de todo su metraje. No es un film de terror al uso, con lo que no es recomendable para todos los paladares, sólo para aquellos que gusten de propuestas que obliguen a su visión con una mínima parte de las neuronas en activo y dispuestos a encajar piezas de un puzzle dudoso.  Interesante. 

- Enoch - 

Evan (IV)

CAPITULO ANTERIOR DE "EVAN"

 CAPITULO 4


JANE

La lluvia precipitándose con más fuerza cada vez, restando visibilidad a una noche sin luna.
Recorro nerviosa calles desiertas intentando recordar... Mi corazón late más apresurado con cada nueva esquina que cruzo.
Una intensa punzada de dolor atraviesa mi cabeza en forma de imagen, y otra, y otra más. Me clavo con un grito ahogado en el sitio…Y de repente todo se clarifica, como piezas de puzzle encajando unas con otras a la perfección, recomponiendo una noche espeluznante a la par que increíblemente sensual.
Acaricio mis labios empapados, al igual que mi pelo, mi cara, mi ropa... El frío me cala hasta los huesos mientras las imágenes siguen sucediéndose…

Jadeo turbada al recrear con dramático realismo a una inconsciente Marissa siendo atacada por…dios que eran? Vampiros? Pero qué..? cómo…?

Súbitamente una corriente eléctrica recorre mi cuerpo presintiendo la magnética energía de… ÉL… al final de la manzana…
Alzo la mirada cuando el poderoso rugido de una moto derrapa con una brusca frenada justo frente a mí. Sus ojos de un azul cobalto arrebatador me atraviesan el alma…
Incapaz de moverme o de articular palabra, me limito a contemplarlo embelesada…

Vestido de cuero negro, con la tela apretada a un cuerpo hecho para pecar y su oscura melena empapada, pegada a su nuca.
Se relame los labios salpicados de lluvia, carnosos y absolutamente tentadores, esculpidos en un rostro anguloso casi perfecto..

Trago saliva y un tímido “hola” se escapa de mi boca entreabierta y reseca, me siento un poco estúpida ante la simplicidad de la frase, pero mi mente es incapaz de conjugar nada más complejo.

Descabalga elegantemente la moto acercándose como un depredador al acecho, metro noventa de puro poder deteniéndose a tan solo unos peligrosos centímetros de mi..
Temblando de pies a cabeza me entierro en su pecho aceptando la invitación de sus brazos, que me acercan a él cuando tira suavemente de mi sujetando una de mis muñecas con su mano.

-ssshhhh… susurra con la nariz pegada a mi oído..
- Sikeray -   


miércoles, 28 de septiembre de 2011

The Caller

Valoración: 6/10


El director Matthew Parkhill (“El punto sobre la i”) firma esta coproducción del Reino Unido y Puerto Rico, una historia de terror psicológico y sobrenatural cuyo guión viene realizado por Sergio Casci.

“The Caller” tiene como protagonistas,  a dos conocidas estrellas del panorama cinematográfico-vampírico de los últimos tiempos, Rachelle Lefevre, quien diera vida al papel de Victoria en la saga “Crepúsculo” y Stephen Moyer, el vampiro Bill de la exitosa serie “True Blood”.

La película nos narra la historia de Mary Kee, una joven en plenos trámites de un incómodo divorcio (con pelea por el perro de la pareja y órdenes de alejamiento violadas por el medio) que se traslada a un nuevo piso a vivir. En él encontrará un antiguo teléfono que no tardará en sonar para ponerle en contacto con una misteriosa mujer.  
Mary no tardará en conocer al profesor Guido, que le ayudará a desentramar aquello que se oculta tras las siniestras llamadas que parecen originarse en el mismo lugar, pero décadas atrás, y con bien oscuras intenciones…

“The Caller” es una película modesta, pequeña, pero efectiva. El desasosegante ambiente que genera con su fotografía, ambientación musical e interpretaciones de los secundarios introduce al espectador en la historia, en el claustrofóbico espacio donde mayormente transcurre la acción. El rocambolesco guión, el papel de sus protagonistas (una notable Rachelle L. y un correcto mas plano Stephen M.) y el ritmo de la trama hacen el resto y mantienen al espectador en continua atención y entretenimiento intentando esclarecer los enigmas.

Interesante para pasar el rato sin grandes pretensiones

- Enoch - 

Evan (III)

 
 CAPITULO 3

Me desvela el insistente timbre del teléfono, que obstinado no cesa en su empeño por taladrarme la 
 cabeza… claudico a la tercera llamada.. Deslizo los dedos por mi pelo, algo enmarañado y me muerdo el labio arqueando las cejas en señal de rendición.

-Mike..- Gruño con voz sombría. Aguanto estoicamente su sermón, merecido? Sí,  probablemente-

-Se puede saber qué has estado haciendo los últimos cuatro dias?, es que te has vuelto loco? Que coño te ha pasado? Creía que te habían capturado, joder!

Aparto el auricular de mi sensible oído entrecerrando mis ojos celestes.

-Mike vas a romperme los tímpanos -le respondo mordaz- he estado liado -murmuro con voz cansada…
La respuesta no le convence, pero se resigna a mi sentencia, con sabia prudencia..

- Buen chico.. mañana te llamo.. -Se despide con un escueto “cuídate”-
-         Mike?- silencio-

- Gracias..

– De nada jefe…

Desnudo, con las negras sabanas arrugadas, pegadas a mi cuerpo empapado en sudor.
Me permito unos minutos mas acostado, envuelto en mi familiar y reconfortante oscuridad, con mi sistema de defensa bloqueando el bombardeo de sensaciones que luchan por aflorar de nuevo en mi mente..
Algo en mi cambió en cuanto sus dulces ojos esmeralda se posaron llorosos sobre los míos por primera vez... y me hicieron perder el control, desatando al monstruo, que con tanto ahínco custodio… una humana venciendo mi humanidad.
Cuatro días… meneo la cabeza sintiéndome poco a poco volviendo a la realidad…mi estomago protesta furioso… necesito una ducha.
Mi instinto percibe el recién consumido crepúsculo.

– Persianas –
 La domótica obedece regalándome un espectáculo de rayos azotando las nubes..
Me deslizo silencioso como siempre al cuarto de baño.

Andares de depredador… un oído capaz de escuchar el aleteo de un buho, fuerza bruta capaz de partir un edificio en dos y una psique que dejaría en ridículo al mismísimo Hawking... pero eso sí... un apetito voraz… en todos los sentidos. Me sonrío irónico a mi mismo por mi disgregación mientras fluye el agua a presión sobre mi cuerpo electrizando mis células felices de retornar a la vida..

Con una reducida toalla enrollada a mis caderas, me preparo un nutrido desayuno que devoro sin casi respirar.

Mi ropa de cuero, mis armas, las llaves de la moto y un portazo.

Mi sensatez divaga entre mis deberes como cazador y mi reciente obsesión por Jane , en un pulso que incluso después de arrancar la BMW sigue sin vencedor.

La velocidad me concentra en la carrera que me lleva casi por instinto a las mismas libertinas calles, mientras las primeras gotas de lluvia salpican el frío asfalto..

El diluvio no propicia la concurrencia y las calles permanecen prácticamente vacías..
Un escalofrío sacude mi cuerpo y mis sentidos me alertan súbitamente de su cautivadora presencia. Freno impulsivamente derrapando la moto con un chirrido, y allí se encuentra ella, mojada de pies a cabeza, bellísima, y absolutamente perpleja cuando sus ojos perturban de nuevo los míos.

Paralizado y con el con el corazón a cien, no puedo mas que mirarla mientras el agua sigue calando en su ropa dibujando unas curvas que mis manos mueren por acariciar.


- Sikeray -  

martes, 13 de septiembre de 2011

Cazadora de Dragones


Medianoche… La noche es oscura y helada…una brisa que parece proceder del aliento del mismísimo Dios del invierno y las cosas muertas, sopla moviendo suavemente los jirones de niebla y limpiando el negro cielo de los últimos vestigios de la tormenta… Retazos de negras nubes, van pasando frente a la luna, creando fantasmas y sombras en el árido y rocoso terreno…. Silencio… Un silencio de sepulcro… de muerte sin resurrección, cubre el desolado páramo…No hay nada que haga que la mirada se detenga, que el oído se aguce… silencio, sombras, frío …
Rocas, montes derruidos, alguna cueva…esqueletos resecos que le dicen al observador que aquí alguna vez existió vida… que este lugar vio el movimiento de los siglos al abrigo de añosos bosques.
Pero que ahora… solo mas rocas…
Desolación hasta donde llega la mirada…
Hasta el gran lago pareciera ser solo un pozo de brea espesa.
A medida que el cielo se despeja la luna derrama su luz en esa porción de tierra detenida en el tiempo… Asoma su gran disco de plata y envía su luz para descubrir… nada… todo se ve igual… Solo se confirma la ausencia total de colores, de matices… Negro, gris, algún ocasional plata opaco, sin brillo…

De pronto… Un roce de metal contra piedra y un brillo antinatural…
Movimientos en la entrada de la cueva…
Alguien estaba a la espera, cobijándose, una sombra entre sombras… Y se acerca al lago.

Hace horas que mantengo mi posición… estoy acostumbrada a la inmovilidad… al silencio… a acechar sin ser vista…
Está cerca…
Lo siento, lo presiento, lo leo en las lentas ondas de la niebla, lo huelo en el frío aire que cala mis ateridos huesos…
Me levanto lentamente… ahora estoy segura de no ser observada… mi pesada espada roza la roca cuando me enderezo… La luna refleja en mi manchada armadura…
Tengo que llegar al lago.
Necesito limpiar toda esta sangre de mí… necesito lavar la pátina de miseria que me cubre.
Ayer maté a la última hembra…
Oh! Dios! Era tan bella… tan grácil… Toda blanca, azul y azabache… cual si hubiera sido construida directamente de las manos de algún extraño Dios artesano usando solo alabastro y lapislázuli…Tan agotada… Tan vencida…
Lágrimas de pesar, corren por mis manchadas mejillas y las seco de un manotazo…
La Cazadora no se puede permitir tal debilidad… Por mas cansado que se halle su corazón.. Por mas rota que tenga el alma…
Soy La Cazadora…
No puedo sacudirme la imagen… Su tembloroso cuerpo tan viejo como el tiempo mismo, pero aún regio…
Su grácil cuello manchado por el río de rubí que mi espada había desbordado con un casi gentil roce…
Sus ojos cuando me miraron… sus increíbles ojos apagándose… pero fijos en los míos… trenzados en mi mirada en un agarre despiadado… con un final reconocimiento …sus ojos llenos de comprensión y piedad… sí… piedad por mí… por la cazadora… por la que la acechó y acosó a través de las distancias… de los siglos… la que uno a uno diezmó a los de su raza… la que uno por uno asesinó a sus hijos y sus hermanos, a toda su maldecida progenie…
A la que, si los astros estaban de su parte, quizás esta misma noche termine su misión matando al Ultimo…
Al que la había evadido desde el primer día…
Se que él sabe… se que sabe que ya asesiné a su hembra… se que sabe que ya no hay más donde correr… que se acabó… que es lo mejor… que él pretende lo imposible… que esta mezquina raza, predadora y despiadada para la cual este planeta fue reservado, jamás lo entenderá.
Jamás será capaz de ver mas allá de su aspecto.. Ya ha sido demostrado…
Crías sacrificadas por doquier.
La raza diezmada por seres de inferior capacidad y fuerza pero mayores en crueldad y maldad… una raza de verdaderos malditos. De seres inmundos incapaces de sentir piedad alguna…
A lo largo y ancho del mundo he visto a muchos, asesinados de las más crueles y despiadadas maneras. Torturados hasta quebrarlos, apresados, encadenados, mutilados…
Y yo soy la solución piadosa de un Dios Irónico y sádico… Este Dios que me tomó de lo que era y me puso en esta piel…
Que me encomendó encontrarlos a todos y cada uno y darles piadosa muerte… Enviarlos a donde tienen que estar… Reunirlos de nuevo con las estrellas, en las alturas insondables…
Donde solo sean alcanzados por la mirada… por la leyenda…

Yo soy la Cazadora… la muerte piadosa y silenciosa y esta noche mi misión termina… termina mi dolor… termina mi cansancio…

Llego hasta la orilla del lago… una a una, me despojo de las piezas de esta armadura que visto desde que recuerdo…
A medida que me voy descubriendo, el frío aire me acaricia la piel… esta piel que me fue prestada…
Tranquila, le digo a mi anfitriona… ya falta poco…
La caricia de la brisa va despertando sensaciones… me saca del entumecimiento en el que vivo… mis nervios se agitan en la superficie blanca y sin mácula que me cubre… extiendo mis brazos, mis dedos, y los observo como si los viera por primera vez… son finos y gráciles… parecieran inadecuados para empuñar la enorme espada que me acompaña… para regar muerte y extinción con unas cuantas flexiones de estos delicados músculos que cubren este delicado esqueleto…
Miro mis dedos… largos, elegantes… de suave toque…
Bajo la mirada… mi cuerpo entero refulge cual plata bruñida a la luz de la madre ancestral…
Mis pechos, turgentes y perfectos, con sus puntas rosadas contraídas por la helada caricia de la brisa… pechos que jamás han sido tocados por una áspera mano masculina... que no han sido adorados en todo su esplendor, que ningún toque jamás sonrojo ni sobresalto… mi vientre…
paso mi mano suavemente por él…
Un vientre creado para crear, pero que nunca acunó ninguna vida en su interior… un vientre tan yermo como el páramo en el que estoy parada… mis piernas… columnas perfectas de alabastro… mi centro… cubierto de suave vello dorado… apenas visible… ese centro que tendría que haber albergado la dura vara de un macho, que tendría que haber vibrado y corcoveado al ritmo de los empujes de fuertes caderas, insuflando en mi interior esa magia que crea vida…
Mis caderas… con la amplitud apropiada…
Sacudo la cabeza…
Todo ello inútil… desolado y árido…
Solo me ha acompañado la soledad y la sangre…
Soy la Cazadora… no una mujer… una creación asesina, despiadada, inamovible… imparable… una perfecta maquina de muerte… no una dadora de vida…
Me voy adentrando en el agua helada… Bien…Me limpiara, me purificara para lo que se acerca… calmará mis ansias… ansias que ya no valen… para las cuales ya es tarde… Tengo una misión… y hoy se completa…
El agua me llega hasta el pecho ya… echo mi cabeza hacia atrás y mojo mis largos cabellos. Son casi blancos… y bajo esta luna brillan como hebras de plata...
Lo llevo largo hasta debajo de mis glúteos… no por nada en especial… solo nunca tuve interés en hacer nada con el… solo lo deje crecer…
Mi tierna carne se eriza con el contacto íntimo y frío del agua… veo el reflejo de mi rostro frente a mi…
Me construyeron Blanca y gris… respetaron mis colores anteriores… mis ojos son del color del letal acero que empuño…
Mi piel y mis cabellos, cálida plata…
Roja por dentro … como todos… Y mi delicada piel está surcada de cicatrices… por los lugares por los cuales ese rojo trató de fluir fuera de mi… de interrumpir mi misión… De vulnerar la única forma digna y piadosa de partir de aquí, para aquellos que una vez fueron mi raza…
Me lavo, frotando fuertemente, la sangre de ella… la dejo en el agua… que se mezcle y se purifiquen mutuamente... la lavo de mi y la vuelvo a llorar… mis lagrimas ahora mezcladas con el agua y su sangre…
Bebo un trago antes de que se diluya del todo.
La llevaré dentro mío cuando todo termine… como debe ser… para partir los tres unidos otra vez… me hundo en el agua y me dejo ir… descansando mi mente y mis miembros en su gélido abrazo… abro los ojos y veo la luna ondeando sobre mi… bañándome en su luz… me hundo lentamente… mis manos acariciando la tersa liquidez que me rodea… la siento deslizarse entre mis dedos…ya no hay lagrimas ni sangre… solo agua transparente y silenciosa… Y si todo terminara ahora… No lo podré soportar… mi corazón estallará en llamas de agonía en el mismo momento en que lo enfrente… mi visión se empieza a nublar… imágenes surcan mi mente… imágenes de crueldad, de seres portentosos y regios, quebrados, encadenados, torturados por esa infame raza invasora…
Con un agónico y silencioso alarido que me desgarra el pecho me impulso férreamente hacia la superficie… hacia el aire y la agonía de la misión por completar…
Soy nuevamente La Cazadora…
La matadora…
La letal sombra que aniquilo a toda una raza…
La que lleva cientos de años sobre esta tierra sembrando el miedo a las sombras y la muerte piadosa….
Llego hasta la orilla y comienzo lenta pero firmemente a cubrir este frágil cuerpo por última vez.
Lo hago con la solemnidad de un rito cumplido miles de veces… Las miles de veces que empuñé mi espada y segué vidas… Las miles de veces que me bañe en esa sangre adorada y poderosa… Las miles de veces que con cada corte, cada muerte, me di muerte a mi misma…

Ya casi, pienso…

Él está escondido en la profundidad de una cueva no muy lejos de la Cazadora… Él huele la determinación de ella.. La tiene incorporada a su ser… La siente cuando se mueve, cuando sufre, cuando mata… Agoniza cada vez que la siente…
El sabe que ella mató a su hembra…. Y sabe lo que eso significa…
El trató de evitarlo, de convencerla de quedarse a su lado, de seguir escondiéndose… pero no… Ella estaba cansada de huir… ella sentía que era tiempo, que ya había sido suficiente… que ya era momento de rendirse y volver al lugar al que sí pertenecían… al lugar donde solo los mitos habitan…
Que finalmente se había dado cuenta de que esta raza depravada no valía ni merecía el sacrificio de ellos por encaminarlos ,por enseñarles, por advertirles que si seguía igual ocasionarían su propia destrucción…
Ella partió con una última mirada hacia él… le entregó todo su infinito amor en una sola y larga mirada… rozó su cuello con su cabeza y partió… él la sintió morir poco después… el sintió el tajo fatal… él la vio a través de sus ojos… vio su terrible dolor y agonía… rugió y rugió de dolor y de rabia… Por que tanto dolor… por que tanto castigo… su enorme sabiduría no lo ayudaba a entender los cínicos designios de estos dioses dementes… no alcanzaba para comprender el enfermizo juego en el que fueron piezas principales…
Rugió y rugió, se desgarro la garganta… golpeo enloquecido las rocas que lo rodeaban que lo aprisionaban… se debatió en la agonía mas profunda y por fin, tomo la decisión… Hoy terminaría todo…
Hoy era el fin…
Hoy acabaría con la persecución y vengaría a su raza…

El la siente acercarse… comienza a salir de la caverna a medida que ella, todo determinación y plata refulgente se acerca… se sienten mutuamente… sus mentes se tocan se enredan en una vals mortal y despiadado… Están danzando al ritmo de su muerte.
Están trabados en combate aun antes de encontrarse..
Se acercan cada vez mas… ya falta poco…
Se huelen…
Se presienten..
Cada uno quiere adelantar al otro en este ataque feroz…

Cada vez más rápido… garras raspando la piedra… talones golpeando la dura roca…

Es una carrera letal…

Ella frena su carrera… todo su cuerpo vibra… su respiración se acompasa su postura casi felina en la tensión previa al ataque… balancea su enorme espada sobre su cabeza aferrándola con ambas manos para que el golpe sea mas mortal…
la luna se refleja en el filo lanzando frías luces de muerte a su alrededor…
El frena su carrera… Agazapado… terrible pesadilla en negro azabache y rojo… pero no de sangre… de furia… sus ojos entrecerrados brillan con todos los fuegos del infierno…las garras prontas…
la cola repleta amenazantes de púas moviéndose lenta, cadenciosamente..
Brillos mortales se desprenden de sus púas negras…
Sus dientes afiladas dagas, prontas a morder y desgarrar…
Se miran fijamente… la fría plata de la mirada de la cazadora en el rojo ardiente de la mirada de el… se miden…. Se evalúan… comienzan a moverse en círculos, uno frente al otro tratando de aventajar a posición…
el la huele…
aspira sus emociones el olor a determinación mortal que emana de ella…
y algo mas…
qué es… ?
Ella huele el aire… huele su furia, su terrible y rasgante dolor… su horror por la raza extinta, por la muerte de su hembra…
huele su enorme desolación por ser el ultimo… el ultimo portento… el ultimo de su raza…
El Ultimo Dragón…

Él la mira sin poder apartar su mirada ni un segundo… se siente perdido en esa mirada… pensó hallar odio en ella…
Lo que ve lo hace dudar… lo confunde… Que está pasando…? Porque cree reconocer aquella mirada.. ?
Ella lo mira… posa sus ojos en su enormidad y fiereza…en las duras escamas brillantes que lo cubren, en la majestad y belleza de su rostro… en la dignidad de su pose… el no la reconoce, no como la reconoció ella, la hembra.
El mágico baile de muerte continua a la luz de la luna…
Él atisba sus cabellos saliendo por detrás del yelmo… sus ojos… sus colores…
Como puede ser que vea algo familiar en esta humana?
En la cazadora de Dragones?
En un miembro de esa raza maldita y destructiva que tanto dolor y muerte provoco en su raza…
Él no sabe… Ella… La única que podía dar muerte piadosa a los demás miembros de su raza… la única con tanto amor a los suyos como para llevar a cabo semejante tarea… destruyéndose a si misma en el camino… La única que se podía sacrificar de ese modo… por eso los dioses la tomaron y la mudaron a esta piel humana… para que pudiera llevar hasta el final esta horrorosa tarea… Dar piadosa muerte a todo y cada uno de sus hermanos y hermanas, a cada uno de sus amigos… y moverse en medio de la maldita humanidad sin ser detenida ni retrasada… Trescientos años le llevó… trescientos años de pisotear su alma y calcinar su corazón en las llamas de la culpa y el dolor… trescientos años de pena inconmensurable que se terminan hoy…
Ve algo de reconocimento en los ojos de él… algo de incredulidad…

Se deciden a la vez… el relaja en algo su postura… retrae sus dientes… ella baja su espada… deja su postura agazapada…
Ella se quita el yelmo…
Ella da un paso…
Se esta acercando a él con la mano extendida…
El retrocede…
Ella habla…
Padre… dice con voz estrangulada…
Padre, soy yo…
Padre debo matarte, pero antes debo pedirte algo…

El la reconoce… el comprende por fin el dolor que le llego de su hembra… el comprende por que ella se entrego a la muerte mansamente… el por qué de la extraña conexión que lo unía a esta criatura…
El dolor lo llena. Lo asola completamente, lo paraliza…
Él la escucha…
Ella le dice…
El la mira…
De a poco la comprensión, la pena, el amor apagan el fuego en sus ojos…
Se vuelven casi blancos… refulgentes de plata…
La mira… es la criatura que tanto recuerda,… que el y su hembra tanto amaron…
Es la combinación de los dos… negro medianoche y blancura lunar…
Ella es la suma de los dos… iba a ser una reina para los suyos… en su cabeza pendía ya en el momento de su creación el ser la guía y destino de todos los dragones en la tierra…
El día que ella desapareció el mundo se tornó negro… sin luz… y los humanos comenzaron a diezmarlos…
Y surgió la Cazadora… La despiadada… la que de una manera terrible, si terminó siendo el destino de su raza…
El continúa escuchándola…

Ella termina de hablar…
El baja la cabeza y se inclina ante ella… él la mira… Las lagrimas corren por su cara descontroladas abundantes… rojas… ella… tan seca de llorar, está llorando sangre por él… por lo que esta por hacer…
Ella se desprende de su armadura y empuña su espada…
Ella articula silenciosamente… “Adiós padre mío”, “cumple tu promesa”.
Y la espada baja…
El siente el golpe… se deja ir… la ve arrojar la espada y correr a él… arrojarse sobre su escamoso cuello y aferrarlo desesperadamente…
En un último estertor le dice “vamos, ya es hora” Y alzando su poderosa cola la deja caer sobre la espalda desnuda de la cazadora atravesándole el corazón…
El la envuelve apretadamente con un ultimo movimiento de su cuerpo y mientras la mirada de ella queda fija en esa gran luna de plata, en el firmamento, le dice…
“Es hora, ya terminó, ella nos espera…”
- Morgana le Faux -
 

Poesía (Poetry)


Valoración: 8/10

A estas alturas a ningún cinéfilo que se precie le tiembla el pulso a la hora de calificar al cine de Corea del Sur como uno de los más líricos -si no el que más- del panorama internacional. Directores como Kim Ki-duk, Bong Joon-ho o Park Chan-wook han demostrado ser verdaderos poetas de la imagen, capaces de convertir en belleza lo terrible a través de su cámara. Poetry, la nueva propuesta del prometedor Chang-dong Lee es bastante menos extrema que las de sus citados compatriotas, pero no por ello se aleja de su ilustre estela.

El film nos presenta a Mija, una sexagenaria dedicada en cuerpo y alma al cuidado de su insoportable nieto. Cuando este es acusado de una violación que ha llevado a una joven al suicidio la anciana comenzará a ver la vida con otros ojos. Si de unos elementos similares -el familiar malvado, la vejez, el olvido- Bong Joon-ho se sacaba de la manga un magnífico thriller con Mother, para Chang-dong Lee el drama llega a través de una exposición pausada, desprovista de sentimentalismo pero increíblemente conmovedora gracias a un verdadero recital de sutileza y buen cine.

La película nos habla de una dignidad que planta cara sin victoria posible no solo a las atrocidades del nieto, sino también a una sociedad corrupta y cínica, esa mafia de padres y profesores incapaz de mostrar un atisbo de sentimiento, un aferrarse a la vida y a la memoria -aunque sea incómoda- frente a la deshumanización del mundo. No es la única lectura del film, pues Poetry aborda en sus diálogos (los foráneos nos perdemos todas las sutilezas de los recitales) algunas de las cuestiones que más han preocupado a la dialéctica poética moderna y muy especialmente a la poesía hispanoamericana, temas como la originalidad del creacionismo o la discusión en torno al poema entendido como espejo y exorcismo de nuestros miedos y esperanzas.

Poetry crece gracias al intachable trabajo de la veterana actriz Jeong-hee Yoon, que con más de trescientas películas a sus espaldas firma aquí una grandiosa interpretación protagonista después de dieciséis años alejada de las cámaras. Ni que decir tiene que la fotografía del film nos depara grandes momentos. Aunque los actores se llevan gran parte del protagonismo, la cámara también nos regala algunas escenas de belleza contemplativa como el largo plano del río que abre el film, contrapuesto a ese precioso final, el poema que recita primero la anciana y enlaza con la niña, la personificación del dolor ajeno en una mirada inquisitiva a cámara como la de Antoine Doinel en Los 400 golpes de Truffaut.

Siguiendo la estela de otros realizadores asiáticos como Hirokazu Koreeda, la película de Chang-dong Lee es ante todo un trabajo presidido por una sensibilidad narrativa excepcional tanto a la hora de filmar como de escribir una historia. Lástima que el premio que obtuvo el guión en Cannes no viniera acompañado de otro a la mejor actriz, algo que el director ya consiguió hace unos años con Secret Sunshine. En definitiva, un soberbio film al que solo se le puede achacar una duración algo excesiva, incluso para los estándares del cine asiático. Poetry es, en efecto, una verdadera reivindicación del cine como vehículo de creación poética.

- Keichi - 

Abel


Valoración: 8/10

Con permiso de Argentina, quizás sea Méjico el país que más está revolucionando el panorama cinematográfico latinoamericano con su incipiente industria. Diego Luna es uno de sus actores más destacados e internacionales. Mucho ha evolucionado el protagonista de "El Búfalo de la noche" desde sus inicios en el mundo de la telenovela hasta convertirse en un productor y creativo que lo mismo se lanza al documental que dirige un serie de animación. Ahora se alía en la producción con John Malkovich y su compañero Gael García Bernal, con el que formó un dúo inolvidable en Y tu mamá también, para dirigir su primer largometraje de ficción.

El guión de la película, escrito por Augusto Mendoza y el propio Diego Luna, nos presenta a Abel, un niño de nueve años internado en un centro de salud mental aparentemente aquejado de algún tipo de autismo. Su madre decide reunirlo durante unos días con sus hermanos en casa, un hogar precario y sin la presencia de una figura paterna. Sin previo aviso, Abel decide suplir esa ausencia asumiendo él mismo el papel de cabeza da familia, con tronchantes resultados para todos hasta que su verdadero progenitor regresa del extranjero. El conflicto está servido.

La historia de Abel es bien sencilla, un minimalismo que ya hemos podido ver en otras producciones mejicanas como Lake Tahoe. Al igual que sucedía en aquel trabajo de Fernando Eimbcke, los protagonistas abordan a través del realismo mágico el tema de la comunicación familiar, al identidad y la pérdida desde el punto de vista del niño, al que la cámara se adapta en todo momento. Cuando Abel asume el papel de padre y su familia le sigue el juego, la interpretación va mucho más allá de jugar a ser adulto. Es toda una reconstrucción de las relaciones que parte de cero. De hecho, dice mucho que el niño sea mucho más creíble en su rol que ese otro padre inmaduro e irresponsable.

Diego Luna ha hecho una estupenda labor de dirección de actores, empezando por los hermanos en la ficción y la realidad Christopher y Gerardo Ruiz-Esparza, siguiendo con una habitual de los seriales infantiles televisivos como Geraldine Galván y terminando con los veteranos Carlos Aragon y  la maravillosa pareja formada por Karina Gidi y José María Yazpik, aunque evidentemente el pequeño protagonista se llevan la palma por la apabullante e inquietante credibilidad de su interpretación. A destacar también la fotografía detallista y desenfocada de Patrick Murguía, uno de los talentos emergentes del cine mexicano.

Aunque el desenlace del film trata de generar una tensión que borre la sonrisa del espectador, la película no podía ser tan cruel con sus protagonistas y se permite incluso un epílogo para demostrar que con el tiempo todo se arregla. Así, este segundo trabajo de Diego Luna es al fin y al cabo una historia pequeña, modesta y entrañable que no oculta su condición de drama pero lo maquilla con un humor teñido de surrealismo que algunos críticos de Cannes han identificado con los trabajos de Michel Gondry y Wes Anderson. A Diego Luna le queda mucho terreno por explorar -y mejorar- pero lo que vamos descubriendo de su mano convence.

- Keichi -

jueves, 8 de septiembre de 2011

Medianoche, la Hora de la Bruja


Son casi las doce de la noche….

Vestida con una etérea túnica blanca, suelta y larga…
Con una guirnalda de azahares en mi cabello oscuro y algunas joyas de plata que parecen refulgir en contra la blancura de mi piel y tintinean suavemente al ritmo de mis movimientos…
Camino lentamente por el piso de la terraza, llego al borde, donde comienza el césped y mis pies desnudos se humedecen con el fresco rocío de la noche…
La brisa juega con mi cabello y la leve tela de mi vestido de mueve contra mi cuerpo cual si fueran jirones de niebla…

Aromas en el aire… olor a humedad, a vegetación.. a piedra húmeda... flores… Paladeo el aire cual si fuera un exótico elixir de vida…

Cruzo el fino cauce de agua, pero sopor el pequeño puente.. esta noche no… entro en el agua… acaricia suavemente mis pies, mis tobillos, mis muslos sienten la sensual y fresca intimidad de su roce…dejo que la punta de mis dedos acaricie su superficie en retribución…
Salgo al otro lado y me interno entre los magníficos y añosos árboles…
Robles, Sauces, Nogales, Acebos… árboles sagrados… Sus ramas gentilmente bajan a mi altura y acarician mi rostro, mis hombros a medida que avanzo… Estoy en absoluta comunión con ellos.
Extendiendo una fragante alfombra en el camino, la lavanda, la milenrama, la retama y el tomillo van perfumando mis pies...
Extiendo mis manos y a medida que voy tocando las hojas, la pequeñas rosas silvestres. Las madreselvas y los jazmines se encienden… comienzan a brillar como si fueran pequeñas y perfumadas luciérnagas vegetales…

Llego al claro…

Comienzo a dibujar un enorme circulo en el suave suelo con mi vara de muérdago, que mantendrá a mi familia errante calidamente atraídos a este circulo de protección…
Mientras lo hago mis labios desgranan el hechizo que han cantado generaciones y generaciones de brujas antes que yo…
“En este círculo de amor,
en este círculo de paz…
En este circulo de amor,
siento la unidad…
la dulce seguridad del amor,
siento la unidad
la dulce seguridad del amor"

La luna esta alta y llena y su luz acaricia mi piel como lo harán las manos de un amante..
leve…
dulcemente...
despertando mis poros y nervios a su paso…
alzo la cara hacia ella…
levanto mis brazos y comienzo a mecer mi cuerpo suave…
lentamente…
mis pechos se despiertan al roce suave de la tela…
mi vientre se estremece de ansias,
mis caderas con su movimiento parecieran acunar esa pequeña fuente de vida que se anida sobre ellas…
Comienzo a cantar suavemente… un murmullo que apenas mueve el aire que sale con mi aliento…
arqueo mi espalda…
me abro a las sensaciones,
dejo que me posean , que me cubran como pequeños besos de una boca reverente…
Los árboles se mecen conmigo, las flores resplandecen, el claro se llena de pequeñas criaturas que vuelan caminan y se arrastran...
a mi llamada los blancos búhos se posan en las ramas y montan silenciosa guardia…
hadas de colores engalanan las enredaderas con blancas flores nocturnas.
Y pequeños duendes prenden brillantes faroles que cuelgan de las ramas de los árboles que rodean el claro…

Mi cántico continua…
Hoy Sagrada Madre Luna soy tuya…
Toma mi femineidad y úsala para sentir lo que siente una mujer amada, saciada… Baja esta noche y usa mi piel para vibrar como vibramos todas tus hijas sagrada madre…
Hoy es tu noche…
Se empieza a alzar mi voz, clara y pura en un cántico ancestral que me corre por las venas como plata líquida,… Dándole claridad a mi voz…
Atrayendo con ella a mis hermanos y hermanas de la noche, a las de este mundo y a las del otro, el que no se ve, el que solo se presiente…
Hay bebidas y comida..
Siéntense Hermanos, Hermanas,
únanse a este aquelarre de luna llena…
Dejen que ella sienta a través de ustedes,
dancen
canten
sientan el pasto en sus pies y el aire leve en sus pieles y cabellos…
dejen que la gran madre los ame… y compartamos este banquete en su honor… Sed Bienvenidos al mundo mágico de lo intangible…
Mi canto se eleva claro y delicado como los mismos rayos de la luna…
Y así continuo sus versos…

"Aire yo soy , fuego yo soy
Agua tierra y espíritu soy

Brisa yo soy, noche yo soy
Arroyo y montaña y diosa soy

Doncella yo soy madre yo soy
Hermana y amante y anciana soy

Dios yo soy, macho yo soy
Niño en sus brazos yo soy

Dios yo soy macho yo soy
El astado que fue sacrificado soy

Ramera yo soy, santa yo soy
Hija y amante. La luna soy

Diosa yo soy, mujer yo soy
Doncella de la luna soy

Diosa yo soy, mujer yo soy
Anciana de tiempo y espíritu soy

En el silencio de la noche
En el silencio de la luna
Yo estoy haciendo mis sueños realidad

En el silencio de la noche
En el silencio de la luna
Estoy haciéndome real"
 - Morgana le Faux -

Marieke, Marieke

Valoración: 4/10



Para la cinematografía belga -más concretamente, la que procede de Valonia-Bruselas- hay un antes y un después de Rosetta, la Palma de Oro obtenida por los hermanos Dardenne en Cannes. Hace diez años aquel hito descubrió a Europa un cine de ficción propio más allá de la sombra protectora de Francia o los caminos fijados por su influyente escuela de documentalistas. Eso explica que poco a poco comiencen a llegarnos producciones de sus nuevos talentos, como es el caso de este primer largometraje de la directora Sophie Schoukens.

A sus veinte años, Marieke siente un completo desinterés por los chicos de su edad. Mientras ella mantiene encuentros sexuales con hombres de edad avanzada su madre vive en un estado de aislamiento emocional desde la muerte de su marido. La llegada de un viejo amigo de la familia desenterrará el oscuro pasado de los protagonistas. Así, la película es una historia de pérdida, la búsqueda del padre en los cuerpos de otros ante una imperante necesidad de amor, personajes que viven en un limbo existencialista con afán de metáfora.

El film se empeña en reivindicar constantemente su denominación de origen, la Bruselas gris de las cafeterías y el chocolate a la que pone voz la canción de Jacques Brel. Esa atmosfera efímera de tristeza y nostalgia la captura con mucho estilo la fotografía de Alain Marcoen, luminosamente fría, como la hermosura juvenil de la protagonista, esos primeros planos de pieles pálidas en la bañera. El protagonismo absoluto del film recae así en Hande Kodja (Meurtrières), una joven y prometedora interprete de belleza glacial bien explotada por el film. También convencen los trabajos de Barbara Sarafian y el veterano Jan Decleir, verdadero icono del cine flamenco.

No es de extrañar que el caldo de cultivo dramático que el guión ha ido preparando termine en nada. Se trata de un drama de ambiente, sin respuestas ni evolución alguna, sobrepuesto a sus personajes en la afectación de sus maneras. Como muchos dramas intimistas, el film de Sophie Schoukens tiende al exceso, tratando de extraer elementos poéticos de situaciones completamente banales o haciendo del llanto una catarsis de violencia. Resulta risible y hasta aceptable que la botella de whisky haya permanecido doce años en la maleta del escritor, detenida en el tiempo a la espera de que los secretos salgan a la luz, pero el momento de histeria en la bombonería ya es demasiado bochornoso.

A juzgar por algunos precedentes como Les fourmis rouges, de Stephan Carpiaux, gran parte del nuevo cine de autor belga parece tener una especial querencia por un tipo de historias que entroncan directamente con el film francés de las ultimas décadas, hoy ajenas al contexto histórico en que rodaban los maestros de la Nouvelle Vague. En efecto, aunque apunte maneras Marieke Marieke resulta tan poco creíble y forzada en los tiempos que corren que el desinterés es inevitable. Esta opera prima sin un fondo concreto se queda a medio camino de todo, abandonada en la mediocridad de su drama.

- Keichi - 

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Después del Trauma Nunca llega la Calma



Sonaron mis alegres cascabeles.
Siempre fui el bufón de la corte.


Suenan campanas de réquiem
Ahora soy el arlequín pintado
de negro y blanco.
Nadie ríe al verme, todos temen
el lado bueno y el malo.


Soy la sombra del pasado
Soy el reflejo de tus pecados.

- N.o.e. - 

Chicogrande

Valoración: 4/10


Antes de sus afamados dramas sociales (Canoa, El Apando, Las Poquianchis), el veterano realizador mejicano Felipe Cazals se estrenó en el mundo del largometraje con una película sobre Emiliano Zapata. Cuarenta años después, Cazals vuelve la vista a otro de los ideólogos de la Revolución Mexicana. Corre el año 1916. Francisco Villa se recupera de sus heridas en las montañas, oculto del ejército norteamericano y las tropas de Carranza. Chicogrande, uno de sus hombres más leales, debe partir en busca de ayuda. En el otro bando, el mayor Butch Fenton no escatima en sangre para localizarlo. Pero lejos de reivindicar el mito de un Pancho Villa que casi brilla por su ausencia, las intenciones del film son otras bien distintas.

Chicogrande discurre entre el mundo del western crepuscular y la sobria recreación histórica. Hay un cierto poso de épica en la película, sus diálogos o esa querencia por los paisajes silenciosos que captura la fotografía de Damian Garcia. Pero al igual que esos parajes, el film es tremendamente árido. E indeciso. La descontextualización del western, geográfica y temporalmente pero sobre todo en su concepción aventurera, viene siendo una constante del género. Mucho ha dado que hablar la condición residual que de cine del Oeste tienen o no este tipo de películas. Aquí no se entiende que Cazals no se decida en su desarrollo plano y lento por uno u otro extremo.

Pero la queja más contundente que puede plateársele a Chicogrande es lo desfasadísimo de su lectura política. Una guerra entronca perfectamente con los ecos estéticos al western que el film pretende evocar. Hay unos buenos y unos malos tremendamente maniqueos entre los que incluso la presencia redentora del médico norteamericano chirría, pero la venganza en tierra extranjera termina remitiendo al 11-S, Irak o Afganistán, del revisionismo al más puro panfleto antiyanqui. El mejor ejemplo de esto es el personaje de Fenton con la cabeza a medio rapar y las prostitutas enanas En su afán por ridiculizar al enemigo, la película cae en el más absoluto de los bochornos.

No obstante, el film tiene una de sus mejores bazas en el reparto. La interpretación de pocas palabras de Damián Alcazar como Chicogrande contrasta con la de su antagonista americano. Daniel Martínez se ve abocado a convertirse en una caricatura insalvable y ridícula, pero durante gran parte del metraje consigue dar vida a un personaje aterrador, cambiando de nacionalidad e idioma. Dos excelentes trabajos a los que se suman los de algunos secundarios de lujo como el sobrio y también bilingüe Juan Manuel Bernal, Jorge Zárate o Patricia Reyes Spíndola.

Por momentos Chicogrande parece ofrecer una visión desacralizada y aséptica del villismo, una brutal contienda de odios en un contexto de miseria y muerte más que la romántica algarabía popular que siempre se ha revindicado. También se acerca al extremo opuesto, pero en vez de hablarnos de ideales y cantar a la historia de su patria o al pasado de sus héroes anónimos, Cazals ha querido mantener un ojo puesto en el presente. Muy probablemente esta película tenga una dimensión diferente para el pueblo mejicano, pero al resto del mundo no se le escapa que Pancho Villa nunca estuvo en Guantánamo.

- Keichi - 

Seda o Escopeta


Mañana, tal vez sea demasiado tarde,
Mañana la sangre adornará las paredes
de las habitaciones de los adolescentes.

Yo seré adolescente mañana si tú no
me haces crecer un poco más.
Enséñame eso que llaman felicidad,
sólo tú me harás cambiar.

Soy un gusano que necesita envolverse
en tu capullo de seda y convertirse en
una mariposa aunque sea negra.

Sangre, sangre en la mañana de mañana
Sangre, sangre de estas pequeñas larvas.

Quedan pocas horas para que despunte el alba,
Queda poco tiempo para que mañana sea ahora...
Decídete o llora en un momento que sea eterno
mi último acto como insecto malogrado.

- N.o.e. - 

El Gran Vázquez

Valoración 8/10


Seguramente el nombre de Manuel Vázquez no significará nada para los no iniciados en el mundillo del tebeo nacional, sobre todo si además son jóvenes. Pero si decimos que este señor fue el padre de historietas tan recordadas como las de las hermanas Gilda, la familia Cebolleta o Anacleto, agente secreto, la cosa cambia. Lo cierto es que la vida privada del dibujante superó con creces a la de sus personajes. Es precisamente esto lo que se ha propuesto contarnos el director Óscar Aibar (La máquina de bailar) en este atípico biopic ambientado en la Barcelona de los años sesenta.

Aunque exagerado para la ocasión, el Vázquez que nos presenta la película no se distancia demasiado del real, un hombre que vivía al día, eterno moroso, mujeriego, crápula y orgulloso de sus timos. Pero esta biografía del engaño no renuncia al retrato nostálgico de una generación de dibujantes, la de Bruguera, una industria e incluso una forma de entender el comic hoy desaparecidas. Por eso se le perdona que no profundice por ejemplo en la obra erótica de Vázquez, esa que en última instancia le llevó a vengarse de quienes le habían robado a sus personajes haciéndolos protagonizar una orgía de sexo en las páginas de un fanzine.

Aibar opta por sumergir el contexto histórico en una estética de tebeo muy parecida a la que utilizara Javier Fesser en La gran aventura de Mortadelo y Filemón. El estupendo trabajo de localización, la música de fanfarria de Nacho Mastretta y la fotografía de Mario Montero dan como resultado una atmosfera luminosa, surrealista, casi teatral, perfecta para ambientar esa España de los Celtas, los burdeles y la picaresca pero también del yugo y las flechas, la represión o los burócratas. Como un medio de escape a esa realizad, algunas vivencias del protagonista al más puro slpackstick parecen directamente extraídas de las viñetas, cuando no se transmutan directamente en ellas.

Aunque el papel de Vázquez parezca creado ex profeso para Santiago Segura, este se esfuerza por escapar a la sombra de Torrente. Lo consigue gracias a una interpretación mesuradamente contenida, tanto que muchos no sabrán apreciarla en su justa medida. También convence su compañera de reparto Mercé Llorens pero los que brillan con luz propia son los secundarios, la fantástica pareja formada por Álex Angulo y Enrique Villén o la emotiva aparición de Manolo Solo transmutado en Ibáñez. Incluso la intervención Jesús Guzmán viene a defender la vocación de referencia, a una casta de actores y una comedia nacional sustituida hoy por caspa de la mala.

El gran Vázquez funciona mucho mejor en su retrato de la primigenia industria del cómic español que como radiografía de su protagonista, una caricatura más que un retrato. Es una elección válida por lo sentimental del asunto, pero uno se queda con la sensación de que en manos de un director más dotado la vida de Vázquez hubiese podido dar mucho más de si, más allá de la tragocimedia. Ello no desmerece el mérito de esta producción francamente diferente que probablemente pasará desapercibida para muchos espectadores. Sería una lástima porque aunque el resultado sea un tanto irregular es una dignísima película.

- Keichi - 

Aileen: Life & Death of a Serial Killer

Valoración: 8/10

Aunque su historial queda muy lejos de las atrocidades cometidas por Dahmer, Gacy o Ted Bundy, Aileen Carol Wuornos ha pasado a los archivos como la primera asesina en serie de la historia de Estados Unidos. El afamado documentalista Nick Broomfield diseccionó en 1992 su procesamiento y posterior condena con The Selling of a Serial Killer. Aquel trabajo denunciaba ferozmente el oportunismo de gran parte del entorno de Wuornos, incluido su propio abogado, que aprovechó para lucrarse a su costa. Diez años después Broomfield y su colaboradora Joan Churchill volvieron a enfocar a una Aileen en los prolegómenos de su ejecución.

Como esa carretera perdida oscurecida por una música inquietante que abre el film, la premisa morbosa del documental es una mera fachada. En efecto, Life & Death of a Serial Killer es el retrato de una vida llena de abusos y desamparo, una mirada incómoda a la marginalidad de la que tantas veces surge el horror y el crimen. El caso de Aileen no fue una excepción. Pero más allá del retrato que componen las imágenes de archivo y cosecha propia o las entrevistas a familiares y amigos de la infancia, Broomfield no renuncia en absoluto a su habitual denuncia. Su documental es, ante todo, un alegato no solo contra la pena de muerte, sino contra un sistema punitivo completamente desquiciado e incluso surrealista.

La cámara intrusa de Broomfield nos ofrece unas impagables filmaciones en el seno mismo de las instituciones judiciales y penitenciarias detrás de las cuales se intuye no solo osadía, sino una verdadera relación de amistad entre el director y su entrevistada. La personalidad de Aileen es toda una incógnita, una asesina divertida y ocurrente que lo mismo se opone a sus propios testigos que pierde los papeles y se transmuta en una demente paranoica de mirada asesina o confiesa sus temores frente a la cámara, reflexiones en ocasiones muy lúcidas para alguien que parece caminar en el filo de la locura. Después de contemplarla uno entiende que la interpretación que le valió el Oscar a Charlize Theron por Monster iba mucho más allá de la mera caracterización.

Las preguntas sin respuestas de este excelente trabajo son una imposición reflexiva que va más allá de la culpabilidad o la inocencia, como esa terrible confesión de la asesina reconociendo que obró en defensa propia pero que no puede aguantar más su estancia en el corredor de la muerte, tan lejos de la anécdota sensacionalista de los medios de comunicación. No deja de ser ejemplar como Broomfield, en esa última declaración a ese circo de cámaras y micrófonos, se incluye dentro de esa misma hipocresía, interesada de uno u otro modo en crear sus propias leyendas negras. Ese dedo acusador deja claro que, aunque un asesino siempre sea un asesino, a veces nosotros también somos responsables.

-Keichi-

martes, 6 de septiembre de 2011

Siege of the Dead (Rammbock)

Valoración: 6/10

Marvin Kren dirige este mediometraje de terror que se ubica en el tan popular subgénero como es el de zombis hoy en día.

Desde Alemania y con un guión de Benjamin Hessler  y con un elenco formado por  Sebastian Achilles, Carsten Behrendt, Melanie Berke, Sabrina Caramanna, Emily Cox, Michael Fuith, Harald Geil, Anka Graczyk, Anna Graczyk, Jörn Hentschel, y Arno Kölker  nos llega esta propuesta cinematográfica que nos narra la historia de Michael, un hombre que llega a Berlín con la intención de visitar a su ennovia, Gabi y recuperarla. Pero sus planes no serán tan sencillos como esperaban, y no sólo por ella, sino porque además de ese encuentro, se topará con una explosión vírica que está transformando a la población, a un ritmo trepidante, en asesinos descontrolados sedientos de sangre… y carne.

Como se puede comprobar, el argumento no reporta grandes novedades al panorama de cine de zombis, pero no por ello estamos ante un film prescindible. Pese a su breve metraje, nos presenta una historia cotidiana, de personajes cotidianos, pero bien dibujados e interpretados, dotando de una verosimilitud interesante a la cinta. Igualmente su ritmo sin tregua  y las situaciones que presenta, captan la atención del espectador y logra su objetivo de entretener al espectador del primer al último minuto.

Si no una joya del género, sí podemos decir de “Siege of the Dead” que es un producto con una calidad más que aceptable y que satisface las expectativas del devorador de cine de terror. Interesante.

- Enoch - 

viernes, 2 de septiembre de 2011

Morgana Le Fay


Bienvenidas…. Bienvenidos….
Esta noche este es mi reino. Un reino de amor, magia y muerte…
El reino de la sacerdotisa, la caza-dragones, la maga, la ramera.
Hada, mujer, diosa…
El Reino de la olvidada, la siempre presente…
El Reino de la Fata Morgana…
Los estaba esperando…
He hecho preparar los mas variados brebajes y alimentos…
la sacerdotisa que habita en mi les brinda su hospitalidad…
pero cuidado… la hechicera es desconfiada.
Esta noche en que la luna brilla entre los jirones de niebla que barre la brisa….
Esta noche en que mágicamente el pasado y el presente se han cruzado, les voy a hablar. Mi voz atravesará los milenios.
Los siglos… para llegar clara como el agua de la fuente a medianoche,
hasta sus ávidos oídos…
esta noche, criaturas desveladas les voy a contar mi historia…
Una historia de amor... magia… y muerte.
Sírvanse del oscuro brebaje que los mantendrá alertas
y escuchen atentamente mis palabras…
…En mi tiempo ustedes me han dado muchos nombres
Hermana, sacerdotisa, ramera, reina de la noche
Usualmente ustedes me llaman La gran Diosa de los espíritus oscuros
Se dice que tengo poder sobre las criaturas malignas
Para envenenar a la gente con mis falsas palabras
La historia me dio a conocer como la medio-hermana del Rey Arturo,
Hija del Dragón, que a mi madre mancilló ,
y a su esposo cruelmente mató
concebida junto a la chimenea
donde la semilla de mi maldad arraigo…
Me convertí en hechicera, y estaba al tanto
de los secretos de la magia Negra.
Discípula directa del gran Merlín
aprendí a curar.
Mi poder creció.
Reiné en la isla de Avalon...
Supere a mi maestro y en Arturo (dicen) encontré él amor...
Engendré con él a Mordred…
Más la felicidad no fue hecha para mí.
Despreciada y abandonada, solo pude alimentar en mi el mal
Mis ojos de rubí podían ver
tantos secretos e historias que nunca dije…
Con las sombras que bailan
en el Sombrío castillo,
mi alma radiante cantaba…
“Yo tengo el poder…
Tengo el poder…
Soy Morgana Le Fay.
Arturo esta preso eternamente de mi mal en Avalon...
A los Caballeros de Camelot derroté y olvidé...

No se metan conmigo
No se crucen en mi camino
O terminarán jugando un papel
En mi juego malicioso

Yo soy el diablo disfrazado
Yo traigo mal a tu vida
Escucha, escucha - escucha lo que digo

Estropearé toda la felicidad.
Revelare la verdad sin tapujos.
Me llaman la Reina de los Fantasmas…
Soy invencible, nunca pierdo
Soy Morgana Le Fay .


-Inspirado en "Morgana Le Fey", de Grave Digger-

- Morgana le Faux -