Título original: Brand New Cherry Flavor
Año: 2021
Duración: 45 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Nick Antosca (Creador), Lenore Zion (Creador), Gandja Monteiro, Jake Schreier, Matt Sobel, Nick Antosca, Arkasha Stevenson
Guion: Nick Antosca, Haley Z. Boston, Lenore Zion, Matthew Ross Fennell, Christina Ham, Mando Alvarado. Historia: Matthew Ross Fennell, Alana B. Lytle. Libro: Todd Grimson
Fotografía: Celiana Cárdenas
Reparto: Rosa Salazar, Catherine Keener, Mark Acheson, Daniel Doheny, Eric Lange, Hannah Levien, Crystal Albert, Darcy Laurie, Siena Werber, Kenya Jordan, Leland Orser, Jayson Blair, Patrick Fischler.
Productora: Eat The Cat, Netflix, Universal Content Productions.
Lisa Nova, tras dirigir un impactante y sobrecogedor cortometraje, se traslada a Los Ángeles, donde espera expandir su creación. La suerte no tardará en llamar a su puerta y tendrá la posibilidad de realizar una película inspirada en su previo trabajo. Sin embargo, el lado oscuro de la industria comenzará a tratar de destruir sus sueños, lo que empujará a la joven a tomar cartas en el asunto y desatar una sobrenatural venganza que amenaza con destruirlo todo.
Nick Antosca, el que fuera creador de las distintas entregas de la peculiar serie de horror "Channel Zero" se embarca en esta nueva propuesta donde su muy personal sello se hace notar, dando forma en la pantalla a un relato bizarro e incómodo, un sueño febril donde la realidad se funde con la absoluta pesadilla.
Su reparto, con la dificultad añadida de dar vida a un elenco de personajes extraños y extremos, cumple con creces su función. Sin embargo, son sus dos protagonistas femeninas, Rosa Salazar y Catherine Keener, quienes insuflan a sus creaciones una pasión y potencia que resultan tan hipnóticas como inquietantes, bordando unos papeles icónicos para el recuerdo.
Antosca vuelve a hacer de la puesta en escena ingrediente diferenciador de su producto. El uso del color, y una onírica dirección artística, dan forma a una atmósfera de amenazante irrealidad que todo parece infectar. Todo ello, mezclado con un relato que escapa a toda normalidad en su desarrollo, donde hallaremos reminiscencias a Cronenberg con sus toques de body horror, o al mismo Lynch en su tono suspendido más allá de la realidad, da un resultado atípico y destacable.
Sin duda no es una serie para todos los públicos, no es fácil ni cómoda, pero sí toda una experiencia para aquellos que busquen un producto diferente ideal para llevarse a las propias pesadillas. Muy interesante.
Esta la tengo para empezar en breve...creo que mañana mismo...tengo puestas buenas esperanzas en ella.
ResponderEliminarUn saludo