martes, 18 de mayo de 2021

Bocas de Arena - Koldo Almandoz


Título original: Hondar ahoak
Año: 2020
Duración: 200 min.
País: España

Dirección: Koldo Almandoz
Guion: Koldo Almandoz, Angel Aldarondo
Música: Aitor Etxebarria
Fotografía: Javier Agirre Erauso
Reparto: Nagore Aranburu, Eneko Sagardoy, Ainhoa Artetxe, Josean Bengoetxea, Iñaki Beraetxe, Sara Cózar, Iraia Elias, Ander Lipus, Ibou Sarr, Mikel Tello
Productora: Txintxua Films

La desaparición de un hombre trae a una pequeña población pesquera a una investigadora atormentada por heridas del pasado. Para esclarecer lo acontecido deberá enfrentarse, no sólo al hermetismo de una comunidad llena de silenciados secretos a voces, sino a un misterio que, ahogado por el estruendo del mar y el oleaje del dolor, se niega a salir a la superficie. 


Koldo Almandoz, tras demostrar su buen hacer con "Oreina" despliega en pantalla todas las virtudes de las que disfrutamos en aquella, y corrige sus debilidades para regalarnos una estupenda serie, un noir vasco tan frío como fiero que comienza deslumbrándonos con su atmósfera para luego conseguir atraparnos con su historia y sus habitantes. 

En "Hondar Ahoak" no podemos sino quitarnos el sombrero ante su puesta en escena. Su apuesta visual, recreándose en los paisajes y en los detalles urbanos, hace del entorno un personaje más, y marca el tono del relato. Imágenes hermosas, amenazantes, se hilan en la mirada de una cámara que recita el latir de las emociones al ritmo de una partitura musical y una cuidada labor de fotografía que terminan de hacer notable el empaque estético de la serie. 

En cuanto a su galería de intérpretes, encontramos unos trabajos, en general,  sólidos, entre los que nos gustaría destacar al siempre interesante Eneko Sagardoy, y, sobre todo, a una inspirada Nagore Aranburu que pese a que pueda parecer, en un inicio de la serie, que trae un personaje duro pero plano, termina regalándonos una creación llena de matices y profundidad. Lo mismo sucede con su narrativa, que en su primera mitad se siente en exceso pausada, incluso lastrada por el silencio, pero que, en realidad, no hace otra cosa que preparar nuestro ánimo para lo que está por venir, regalándonos un segundo tramo pleno de interés y emoción. 

Un producto diferente, con un sello muy personal y cuidado. Un relato sobrio, serio, poético, urbano y doliente que atrapa y convence en fondo y forma. Muy interesante. 

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