Año: 2016
Duración: 80 min.
País: Australia
Dirección: Gerald Rascionato
Guión: Gerald Rascionato, Stephen Lister
Música: The Newton Brothers
Fotografía: Andrew Bambach, Gerald Rascionato
Reparto: Megan Peta Hill, Joel Hogan, Pete Valley, Suzanne Dervish-Ali, Tara Wraith, Josh Potthoff, Mark Fell, Christopher Callen
Productora: Just One More Productions / Exit Strategy Productions
Tres amigos preparan un vídeo de presentación para el casting de un reality show de aventura extrema. Para ello, además de otras actividades, deciden filmar su experiencia en una inmersión en el océano rodeados de tiburones en una jaula de seguridad. Sin embargo, nada resulta como esperaban y lo que auguraban aventura segura se torna pesadilla al quedar todos ellos, por avatares de un mar traicionero, a la deriva y a la merced de los depredadores marinos.
Gerald Rascionatto dirige y escribe esta tercera entrega de la saga Open Water, una trilogía sin relación alguna entre sus partes más allá de la situación de abandono, deriva y peligro de sus protagonistas en medio de un peligroso y letal océano. Lamentablemente, a cada entrega, la calidad desciende más y más, como esa jaula que cae sin remedio a las profundidades...
A favor de esta película encontramos poco que decir. Su planteamiento entretiene sin revestir innovación ni sorpresa alguna, y contiene en su metraje alguna que otra escena suelta brillante y bien rodada, pensada y montada para un tipo de cine de este formato, el de metraje encontrado.
En su contra tiene varios pesos pesados. En primer lugar, su trío protagonista, con unas interpretaciones muy por debajo de lo necesario en cuanto a calidad para una cinta de estas características que busca la inmersión del publico frente a una hiper realidad. Pero es el guión el que hace aguas por todas partes. No hay coherencia ni excusa lógica alguna para que los supervivientes continúen grabándolo todo. En sus páginas encontraremos giros argumentales inverosímiles y absolutamente gratuitos, más de uno carente de lógica o realismo alguno. El dibujo de personajes, interacciones y diálogos entre ellos termina de rubricar el desastre que torna la película comedia involuntaria a tramos... además de lograr que el espectador empatice más con los escualos hambrientos que con el aciago destino de los naufragos.
En conclusión, una película decentemente rodada, pero mal contada e interpretada, sólo disfrutable (y no demasiado) para los incondicionales de historias que giran en torno a los depredadores marinos. Fallida.
Enoch
Valoración:3/10
Trailer:
Gerald Rascionatto dirige y escribe esta tercera entrega de la saga Open Water, una trilogía sin relación alguna entre sus partes más allá de la situación de abandono, deriva y peligro de sus protagonistas en medio de un peligroso y letal océano. Lamentablemente, a cada entrega, la calidad desciende más y más, como esa jaula que cae sin remedio a las profundidades...
En su contra tiene varios pesos pesados. En primer lugar, su trío protagonista, con unas interpretaciones muy por debajo de lo necesario en cuanto a calidad para una cinta de estas características que busca la inmersión del publico frente a una hiper realidad. Pero es el guión el que hace aguas por todas partes. No hay coherencia ni excusa lógica alguna para que los supervivientes continúen grabándolo todo. En sus páginas encontraremos giros argumentales inverosímiles y absolutamente gratuitos, más de uno carente de lógica o realismo alguno. El dibujo de personajes, interacciones y diálogos entre ellos termina de rubricar el desastre que torna la película comedia involuntaria a tramos... además de lograr que el espectador empatice más con los escualos hambrientos que con el aciago destino de los naufragos.
En conclusión, una película decentemente rodada, pero mal contada e interpretada, sólo disfrutable (y no demasiado) para los incondicionales de historias que giran en torno a los depredadores marinos. Fallida.
Enoch
Valoración:3/10
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