Año: 2017
Duración: 143 min.
País: Francia
Dirección: Robin Campillo
Guión: Robin Campillo, Philippe Mangeot
Fotografía: Jeanne Lapoirie
Reparto: Nahuel Pérez Biscayart, Adèle Haenel, Yves Heck, Arnaud Valois, Emmanuel Ménard, Antoine Reinartz, François Rabette
Productora: Les Films de Pierre
La película nos lleva a París, a principios de la década de los noventa. El SIDA se encuentra en pleno apogeo sesgando vidas y demonizando colectivos. En este entorno y coyuntura conoceremos a un grupo de jóvenes activistas radicales dispuestos a todo por dar visibilidad a la enfermedad, reivindicar el tratamiento de la misma por la sociedad y las instituciones y buscar concienciar del problema que representa frente un mundo predispuesto a mirar para otro lado. Viviremos con el grupo una intensa aventura, una atroz lucha donde la diversidad y la pasión por la vida trata de vencer toda adversidad.
Robin Campillo (Chicos del Este, La Resurrección de los Muertos) dirige y escribe este largometraje que mira con ojo crítico a la historia más reciente y aún palpitante para remover conciencias y emociones. Con él se alzó con el Gran Premio del Jurado en el festival de Cannes, pasó por la sección de Perlas del 65 Festival Internacional de Cine de San Sebastián y comenzó un interminable viaje de reconocimientos, nominaciones y galardones cinematográficos.
La película tiene a su favor una gran interpretación coral, su elenco, entregado en sus creaciones, reviste de verdad a la heterogénea galería de personajes, factor imprescindible para trascender más allá de la pantalla y contagiar emociones, entusiasmo y desesperación a la audiencia que se adentra en su historia.
Un guión bien medido para generar conciencia y controversia, adentrándose en distintas perspectivas de una misma realidad, situándonos tras dispares miradas hacia un mismo doliente hecho, presentándonos la lucha desde diversos ángulos, junto a un montaje hábil y vivo, hacen de su historia algo fluido y cargado de interés.
En su contra juega sin duda su muy dilatada duración, que se ve un tanto lastrada por una cierta reiteración de discurso y recursos en su desarrollo argumental y, a tramos, puede resultar un tanto previsible en sus giros, factor que merma la emoción despertada.
Pese a sus debilidades, "120 pulsaciones por minuto" es un film bien realizado e interpretado, una película necesaria que recuerda el reciente ayer que aún palpita en el hoy, que reivindica la fuerza del ser humano, la necesidad de lucha, y la pasión por la vida. Interesante.
Valoración:7/10
Trailer:
No hay comentarios:
Publicar un comentario