Valoración: 4/10
Si bien la primera entrega de White Noise (Más allá) no fue para tirar cohetes, esta segunda parte pierde aún más interés y calidad...
En ella se mezclan dos temas, la experiencias cercanas a la muerte y las psicofonías...
Nos narra la historia de un hombre cuya familia es asesinada y que un tiempo después realiza un intento de unirse con ellos que resulta frustrado por los médicos. A partir de ahí comenzará a ver un aura especial en aquellas personas que están a punto de morir y, al investigar todo lo que le ocurre irá descubriendo oscuros secretos...
El mayor problema de esta película es ese "aire de telefilm" que tiene del primer al último fotograma. Sobreutiliza las apariciones al más puro estilo oriental, pero no termina de lograr apenas sobresaltos en el espectador, sino aburrimiento por su exceso y su no muy cuidada calidad en efectos.
Por otra parte, si bien su argumento es atractivo e interesante, su forma de contarlo no lo es tanto. Apabulla al espectador con tanto tema paranormal desde el mismo comienzo del film, y todo lo explica de una forma excesivamente atropellada, todo ocurre a una velocidad excesiva, lo que le hace perder al guión demasiada credibilidad evitando que nos impliquemos con la historia y, por lo tanto, que nos aterremos con ella.
Esta prescindible secuela no está mal para pasar el rato (pero no un día de sueño, pues más que asustarse, uno se duerme) pero tiene demasiadas carencias como para que merezca demasiado la pena.
Enoch
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