Año: 2018
Duración: 95 min.
País: Rusia
Dirección: Kirill Sokolov
Guion: Kirill Sokolov
Fotografía: Dmitriy Ulyukaev
Reparto: Aleksandr Kuznetsov, Vitali Khayev, Evgeniya Kregzhde, Michael Gorevoy, Yelena Shevchenko, Igor Grabuzov, Aleksandr Domogarov
Productora: White Mirror Film Company
Un joven se presenta en casa de los padres de su novia. Lejos de desear un encuentro pacífico, su intención será acabar con el padre su amada, un reputado policía. La razón de este deseo y letal plan es el odio que se ha fraguado en el interior del joven frente a los relatos de las heridas de su novia por haber sufrido, según dice, abusos por parte de su progenitor. La tragedia entre los muros del hogar familiar está servida...
Desde Rusia nos llega esta alocada y estilizada propuesta, un film escrito y dirigido por Kirill Sokolov que con su estupendo trenzado de enredo con violencia y drama hizo las delicias del patio de butacas de la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián alzándose como una de las favoritas del público en su 30 Edición.
Pese a la teatralidad de su puesta en escena, desarrollada, en gran medida, entre los muros de un pequeño piso, el director demuestra una absoluta maestría en el manejo del espacio sacando el mejor resultado hasta del más mínimo detalle, vistiendo todo ello con una excelente paleta de colores y aderezándolo con un gran imaginario para la violencia y una creativa mala leche que concatena sorpresas de principio a fin.
El buen hacer de sus actores y una ambientación musical que trae a nuestra memoria ecos de Tarantino, termina de dar forma a un producto que si bien no es perfecto (encontramos un área central donde decae en intensidad, entretenimiento y ritmo, que más tarde recupera), sí que resulta de inteligente calidad y digno de pasar un buen rato de cine diferente.
Trailer:
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