Valoración: 5/10
João Canijo escribe y dirige esta película portuguesa que habla de grandes formas de sencillas historias, un extendido melodrama que conquistó el premio Fipresci en el 59 Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
La película es un retrato de la vida de una familia, a cuya cabeza está Márcia, una mujer soltera con dos hijos ya crecidos que se gana la vida trabajando de cocinera y que convive con su hermana Ivete en las afueras de Lisboa y entre ambas tratan de llevar adelante la unidad familiar. Las cosas se complican ante la mala vida de su hijo, y con su hija enamorándose de un hombre casado, mayor que ella… el drama está servido.
Pese a lo culebronesco y rocambolesco de la historia, narrada como un telefilm familiar televisivo, la película tiene varios aspectos que la salvan de la quema. Por un lado, la correcta interpretación del elenco protagonista (Rafael Morais, Nuno Lopes, Fernando Luís, Rita Blanco, Cleia Almeida, Anabela Moreira, Marcello Urgeghe, Francisco Tavares, Vera Barreto, Beatriz Batarda, Teresa Tavares) y por otro un uso muy vivo de la cámara y la inclusión de diversos recursos que por su originalidad implican más al espectador en las intimidades de esta familia, como planos desde el exterior, que, a modo de pantalla dividida, hacen que la audiencia pueda asomarse a las ventanas de la casa y vivir dos escenas paralelas y simultáneas, la sensación de realismo y voyeurismo está muy lograda y es uno de los aspectos más interesantes de este film.
Por el contrario, la larga, larguísima duración de la película y ciertas escenas extendidas al extremo, coartan el buen ritmo narrativo y pueden conducir al aburrimiento, factores, estos últimos que lastran y dificultan su visionado más de lo debido. Aceptable mas prescindible.
-Enoch-
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