Secuestrados

Valoración:7/10

Miguel Ángel vivas firma una de las que fueron gratas sorpresas cinematográficas dentro del panorama del cine español de 2010. Hablamos de “Secuestrados”, un trepidante thriller que obtuvo el galardón a la mejor película en la sección “terror” del festival de Austin, que pasó por el festival de Sitges y la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián, consiguiendo, en cada uno de los casos el favor de crítica y público.

La película nos narra la historia de un matrimonio, Jaime y Marta, y su hija Isa, que están terminando de ubicarse en su nuevo hogar, una villa en un barrio residencial, celebrando su primera noche. Pero la paz se ve quebrada cuando un grupo de encapuchados entran por la fuerza en la casa familiar dispuestos a robar, cueste lo que cueste, y caiga quien caiga.

El principal pilar sobre el que se asienta esta producción y en el que parece residir el secreto de su éxito es en la inmediata empatía que se establece entre el público y sus protagonistas y la historia que se está contando. Es fácil y sencillo identificarse con las reacciones de los “secuestrados”, sentir en la propia piel su ansiedad y miedo. ¿Y cómo se consigue en el caso de este film? Una cámara viva que nos muestra, cual voyeurs y a tiempo real cuanto acontece, un guión cercano, sin grandes giros ni trampas que romperían el hechizo de verdad, unas interpretaciones (Fernando Cayo, Manuela Vellés, Ana Wagener, Guillermo Barrientos, Dritan Biba, Martijn Kuiper, Xoel Yáñez, Candela Fernández) más que correctas (destacando quizás a Manuela Vallés, en el papel de la hija, Isa, cuya actitud consigue retorcer más aún, si cabe, los nervios de la audiencia) y un montaje a ritmo de vértigo que consigue que quien se aventura al visionado de esta película se aferre con uñas y dientes a la butaca desde el primer instante hasta el último plano del film que parece a la vez eterno y breve como un suspiro ante sus ojos.

Muy interesante y un fresco ejercicio de estilo cinematográfico.

-Enoch-